La fuerte competencia que desde hace años registra el sector español de las telecomunicaciones ha provocado que Movistar, Orange y Vodafone hayan ido perdiendo en los últimos ejercicios cuota de mercado en términos de ingresos minoristas en favor de las nuevas operadoras que han irrumpido con fuerza en nuestro país, especialmente Digi.
El crecimiento registrado por estas operadoras alternativas hizo que a finales de 2022 supusieran ya más del 20% de la facturación minorista del sector español de las telecomunicaciones y el audiovisual. Unos datos que no incluyen las cifras del Grupo MásMóvil, que también está viendo cómo su cuota de mercado empieza a caer tras años de fuerte crecimiento.
Según recoge el Informe Económico Sectorial de Telecomunicaciones y Audiovisual correspondiente al año 2022 de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el pasado año Movistar, Vodafone y Orange representaron el 69,5% del total de los ingresos minoristas, frente al 71,4% del anterior. Y si comparamos con los datos de hace cinco años (78,2% en 2017) la caída es de 8,7 puntos porcentuales.